Hyla arborea - Ranita de San Antonio



Hoy voy a introducir un nuevo apartado en el Reino animal, que hasta la fecha había estado vacío en el blog, me estoy refiriendo a la Clase Amphibia, es decir, los anfibios.

Estos maravillosos seres, se agrupan para su estudio junto a los reptiles, en lo que se conoce como Herpetología. Con ellos comparten algunas similitudes fisiológicas y de hábitats, además de una gran sensibilidad a los cambios o alteraciones del medio en el que viven, siendo por tanto grandes bioindicadores de los sistemas ecológicos.

Su actividad se reduce a un estrecho rango de temperatura y humedades ambientales, siendo además muchas especies de carácter nocturno, lo que en ocasiones hace dificultosa su observación sino se tienen en cuanta unas cuantas premisas.

Para estrenarnos os presento a la Ranita de San Antonio, que todos seguramente conoceréis, y a la que su pequeño tamaño (5-6 cm), su bello color verde y esa franja negruzca con reborde blanco que surca todo su costado, le hacen prácticamente inconfundible.

Existe una especie similar, aunque es bastante más rara, que es la Ranita Meridional (Hyla meridionalis), de ligero mayor tamaño, longitud menor de la banda oscura del costado y canto también diferente, aunque podría llegar a darse el caso de hibridación entre ambas especies, dando lugar a individuos de características intermedias e infértiles.

Habita en zonas húmedas permanentes y con vegetación en las orillas, la cual, utiliza para trepar. Desgraciadamente la destrucción cada vez mayor que sufren estos hábitats, la contaminación de las aguas y la introducción de especies alóctonas han mermado severamente sus poblaciones, encontrándose actualmente en clara regresión.

Se encuentra presente en la práctica totalidad de la provincia, estando además muy extendida por toda la península, aunque escasea más en el sur y este de la misma.

La fotografía fue realizada a comienzos del mes de noviembre en las orillas del Arroyo Malucas. La encontré encima de un palito a ras de suelo y allí le hice las pertinentes fotografías, en las que posó como una campeona.


Clase - Amphibia; Orden - Anura; Familia - Hylidae
Género - Hyla; Especie - Hyla arborea

70mm; f7,1; 1/250; 200ISO; - 0,7 EV

Plumbago europaea - Belesa



La Belesa o Dentaria es una planta perenne, algo leñosa en la base, que pertenece a la familia de las Plumbagináceas. Su porte es elevado, llegando en ocasiones a medir un metro de altura.

Los tallos son estriados y las hojas son grandes, con formas ovales en la base y lanceoladas en la parte superior, dispuestas de manera alterna. Sus flores forman racimos terminales, tienen forma embudada y cinco pétalos azul violáceos abiertos en estrella.

Florece entre los meses de julio y septiembre en lugares ruderalizados o alterados, así como baldíos y zonas abiertas, por lo que es un plante más o menos común.

Entre sus propiedades destacan su poder antiinflamatorio, que se ha utilizado antiguamente, como indica el nombre de Dentaria, para curar encías y dolores de muelas, pero también contra la dermatitis y otros problemas de la piel.

Con todo esto hay que destacar que posee ciertas toxinas, sobre todo para la fauna, habiéndose utilizado de manera ilegal para la pesca, como otras plantas más conocidas; también existen citas de su uso como planta fumable y algunos otros usos de menos interés.

El nombre de Belesa parece estar relacionado con el de Beleño (otra planta tóxica), y hace referencia a esas   propiedades tóxicas que citaba anteriormente.

La fotografía fue realizada a mediados del mes de septiembre en el entorno de Navalmanzano, más concretamente en las proximidades de la ermita de San Cebrian, de la que os dejo un par de fotografías donde aparece incluso la planta: San Cebrian Día y San Cebrian Noche.


Clase - Magnoliopsida; Orden - Caryophyllales; Familia - Plumbaginaceae
Género - Plumbago; Especie - Plumbago europaea

100mm; f6,3; 1/125; 200ISO; Trípode y Reflector

Clavariadulphus pistillaris



Hace ya unos meses escribía sobre un pariente próximo a la especie que hoy os presento, me refiero al Aphyllophoral Clavariadelphus truncatus. Si echáis un ojo a aquella entrada veréis que los parecidos son bastante razonables.

Ambos tienen una forma muy similar, alcanzando portes de hasta 15-20 centímetros de longitud y hasta 5 centímetros de anchura, de colores amarillos a pardo anaranjados.

Las diferencias estriban en tres aspectos principalmente, uno morfológico, muy ligero, siendo la parte superior de la seta aplanada en C. truncatus y algo hemisférica en C. pistillaris; otro organoléptico, mientras que C. truncatus es de sabor dulce, C. pistillaris es bastante amargo al probar su carne, lo que nos ayuda sin duda a distinguir ambas especies; y por último, sus diferentes hábitats, siendo C. truncatus frecuente bajo coníferas y C. pistillaris habitual de hayedos.

Con esas premisas podríamos diferenciar, en principio, ambas especies sin mucha dificultad, aunque todo es relativo y a veces existen ejemplares que ofrecen bastantes dudas.

La fotografía fue tomada durante el mes de octubre en un hayedo al norte de la provincia de Palencia. Utilicé un objetivo de 50mm, no macro, pero muy luminoso (f1,4) y con una decente distancia mínima de enfoque que lo hace útil para fotografiar setas y plantas "de cuerpo entero" o detalles, siempre que el objeto sea de un tamaño apreciable.


Subdivisión - Basidiomycotina; Subclase - Aphyllophorales s.l.; Orden - Cantharellales
Género - Clavariadelphus; Especie - Clavariadelphus pistillaris

50mm; f5,6; 1/6; 100ISO; Trípode y Reflector