Quiero continuar hoy con un nuevo miembro del orden de los Nuerópteros como es la Hormiga León, y cuyos integrantes se caracterizan por poseer en sus alas una densa red de nervaduras, como ya os mostré en su día en la entrada sobre el Libelloides hispanicus.
Son insectos que poseen cierto parecido con las libélulas y caballitos del diablo, del orden de los Odonatos, pero con los que solamente comparten eso, un cierto parecido.
Poseen dos antenas cortas y robustas, colores poco llamativos que les permiten camuflarse entre la vegetación y un vuelo lento y pesado, características éstas que los diferencian bien de los Odonatos.
Los individuos adultos se alimentan de pequeños insectos que encuentran en la vegetación, mientras que las larvas son depredadoras, también de insectos, a los que cazan construyendo trampas en suelos arenosos y aguardando enterradas en el fondo a que algún incauto individuo (hormigas principalmente) caiga en sus "redes".
Las citadas larvas poseen unas potentes y grandes mandíbulas que suele dejar al descubierto en el fondo de las trampas.
Habita en lugares secos, cálidos y arenosos, siendo el verano la época en las que con mayor facilidad podríamos encontrar estos maravillosos individuos, aún así, no es sencillo.
La fotografía se realizó durante el verano en las proximidades al pequeño pueblo segoviano de Adrados.
Son insectos que poseen cierto parecido con las libélulas y caballitos del diablo, del orden de los Odonatos, pero con los que solamente comparten eso, un cierto parecido.
Poseen dos antenas cortas y robustas, colores poco llamativos que les permiten camuflarse entre la vegetación y un vuelo lento y pesado, características éstas que los diferencian bien de los Odonatos.
Los individuos adultos se alimentan de pequeños insectos que encuentran en la vegetación, mientras que las larvas son depredadoras, también de insectos, a los que cazan construyendo trampas en suelos arenosos y aguardando enterradas en el fondo a que algún incauto individuo (hormigas principalmente) caiga en sus "redes".
Las citadas larvas poseen unas potentes y grandes mandíbulas que suele dejar al descubierto en el fondo de las trampas.
Habita en lugares secos, cálidos y arenosos, siendo el verano la época en las que con mayor facilidad podríamos encontrar estos maravillosos individuos, aún así, no es sencillo.
La fotografía se realizó durante el verano en las proximidades al pequeño pueblo segoviano de Adrados.
Clase - Insecta; Orden - Neuroptera; Familia - Myrmeleonidae
Género -Creoleon; Especie - Creoleon sp.
100mm; f8; 1/200; 100 ISO; Flash